(Prensa/FD).-El diputado ante la Asamblea Nacional, Franklin Duarte, dijo que se cumplió lo que desde hace tiempo venían denunciando. En la denuncia se explicaba que la instalación de casas de cambio en la frontera no es sino «otro negocio para los enchufados rojos, que solo sirve para legitimar el contrabando».
— Desde el principio se veía lo irregular del planteamiento, pero al ponerlo en práctica se evidenció, ya que además de no incidir para nada en el fortalecimiento del bolívar, muy por el contrario ha hecho que siga bajando su valor en la frontera, han puesto todas las trabas que se les ha ocurrido para hacer el negocio aún más rentable para quienes están detrás de él—.
Igualmente indicó que este es un negocio discriminatorio, porque «le prohíbe el acceso a quienes ganan sueldo mínimo ya que no declaran impuesto, lo cual es ilegal y viola derechos humanos fundamentales de los ciudadanos que más necesitan».
